Comer o ayunar en el intento

Nuestra experiencia en parrilla D' Sol

Quisimos comer en familia en un conocido lugar de la ciudad, pero fue imposible. Les cuento que pasó.

Un sábado cualquiera y la familia tenía hambre y pereza de cocinar, la mejor opción, salir a comer.

Como ya era un poco tarde nuestro lugar habitual estaba lleno, así que buscamos una alternativa. Fuimos a la parilla D Sol y su nuevo local, en donde si habia espacio.

Antes de continuar, les cuento que ya habíamos tenido un mala experiencia en su antiguo local. Mi hijo menor se lastimó uno de sus dedos con una silla en mal estado, obviamente nos fuimos.

Pero como uno es necio y el local era nuevo, volvimos.

Entonces llegamos y nos ubicamos en un buen lugar, mesa cómoda y no tanto ruido. El local agradable y bonito.

No me quiero alargar en la historia, pero esperamos más o menos 20 minutos y ningún mesero se acercó, es más ni siquiera a la zona donde estabamos sentados. Logicamente, nos fuimos.

Hablé con el administrador quien no sabía lo que estaba pasando, obviamente estaban desbordados por la situación.

¿Moraleja? Nunca más vamos a regresar a pariilla D Sol, dos malas experiencias y sin siquiera probar la comida.

Y ojo, que nosotros eramos clientes cuando el local de Miraflores parecia una cantina de mala muerte pero con buena comida y mejor atención.

Así que, ojo cuando leas esto, si estás con mucha hambre, no vayas a parrilla D Sol, tal vez salgas con un dedo herido.

Mejor me voy a hacer un sanduche de queso en la tostadora.

Chao.